Incluso  para aquellos que creen que no hay nada realmente aterrador acerca de Halloween, la festividad anual que celebra fantasmas, guls y brujas, podrían sorprenderse al enterarse de esto: unos 157 millones de estadounidenses participaron en actividades de Halloween en 2015. Eso es poco menos de la mitad de la población del país y es 12 por ciento mayor que los 117.2 millones de personas que asisten a los servicios religiosos cada semana.

Según la Federación Nacional de Minoristas, 2018 promete ser un año excepcional para el gasto de Halloween: los desembolsos totales alcanzarán los $ 9 mil millones. De eso, unos $ 3.2 billones se destinarán a disfraces, $ 2.7 billones para decoraciones y $ 2.6 billones en dulces. Se estima que este año se gastarán $ 400 millones en tarjetas de felicitación para Halloween.

Los orígenes de halloween

Bueno, detente y piensa en esto por un momento. Como señala History Channel, Halloween tiene sus orígenes en un antiguo festival celta llamado “Samhain”. Señalaba el final del verano y la temporada de cosecha y el comienzo del invierno. Los celtas creían que el 31 de octubre era la noche en que los espíritus de los difuntos regresaban a la tierra.

Curiosamente, la expansión del catolicismo en las antiguas tierras celtas no eliminó a Samhain. Simplemente fue rebautizado el “Día de los muertos” y se celebró el 2 de noviembre. La celebración se llamó “Día de Todos los santos santos”, y la noche anterior a la ceremonia conocida como Samhain finalmente se transformó en nuestra palabra moderna “Halloween”.

Más aún, un porcentaje significativo de estadounidenses dice que la idea de que los fantasmas son reales no está fuera de su alcance de creencia. Según el Pew Research Center, el 18 por ciento de los estadounidenses, casi uno de cada cinco, dice que ha visto un fantasma o ha estado en presencia de uno. “Una proporción aún mayor, 29 [por ciento], dicen que se han sentido en contacto con alguien que ya murió”, agregó el informe Pew.

 

Halloween y la Biblia

La Biblia, que contiene la guía de Dios para nuestras vidas, ofrece respuestas directas sobre el estado de los muertos. Las Escrituras enseñan claramente: “Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben” (Eclesiastés 9: 5). “Porque en la muerte no hay memoria de ti; En el Seol, ¿quién te alabará?” (Salmo 6: 5). “El alma que pecare morirá” (Ezequiel 18: 4).

La muerte es el completo fin de la vida. La muerte es un estado de inconsciencia en la cual no hay pensamientos, emociones, trabajo ni comunicación de ningún tipo. Halloween trae consigo el concepto pagano de la inmortalidad del alma.

“Cuando miras detrás del velo, la idea de que debemos temer a los espíritus de los muertos es bastante diabólica”, dice el Pastor Doug.

“La teoría de la inmortalidad del alma fué una de aquellas falsas doctrinas que Roma recibió del paganismo para incorporarla en el cristianismo. Martín Lutero la clasificó entre “las fábulas monstruosas que forman parte del estercolero romano” El Conflicto Inminente, p. 36

“Merced a los dos errores capitales, el de la inmortalidad del alma y el de la santidad del domingo, Satanás prenderá a los hombres en sus redes.” El Conflicto Inminente, p. 70

 

Fuente: Amazing Facts